15 marzo 2013

De profesión … Corinna.


A estas alturas, hay que ingeniárselas para poder subsistir, tal cual suena, haciendo cualquier cosa. Hay quien agudiza el ingenio hasta tal punto que se autodenomina Asesora del Gobierno de España, así es, tal cual…

De profesión Corinna, y una profesión muy bien remunerada, con casa incluida, solo diré que esta casa es Patrimonio Nacional, y ha sido reformada con fondos públicos, es decir, pagamos todos, como los safaris.

Y, por si fuera poco, la “ no-amante real”, según dicen o la presunta amante, según otros, se ha convertido en un tema de Estado, esta semana se han dado las oportunas explicaciones en el Congreso, pero en la Comisión de Secretos, lo cierto, es que no nos vamos a enterar de la verdad verdadera. A pesar de lo dicho por el Ministro Margallo o Rubalcaba, públicamente.

Me gustaría no creer que, no sólo no mantenemos a la ya de por sí muy cara Familia Real, sino también a cómo era…entrañables amigas de Su Majestad, el Rey.

Y, no tenemos derecho a saber la verdad…

Mientras, seis millones de parados siguen buscando un trabajo… muchos habrán pensado que quieren trabajos como éste, donde te puedes permitir joyas de millones de euros, vacaciones en Brasil y viajar con pasaporte diplomático… y yo cobrando a 7 euros la hora!!!, que injusta es la vida.

Estoy pensando que de mayor quiero ser Corinna, salir en las portadas de periódicos y de revistas del corazón, con ropa elegante…viviendo del esfuerzo de todo un pueblo, completamente estrangulado económicamente.

Pensándolo mejor, no quiero ser Corinna, jamás en la vida lo sería, eso tiene otro nombre, caradura.

La culpa no es de ella, es nuestra, por seguir manteniendo a su entrañable amigo y su familia, incluido el presunto chorizo de su yerno…

Hasta cuándo vamos a seguir consintiendo todo esto?????????.


Conchi.

06 marzo 2013

La semana sin tele y sin series online.




Cuando decidí comentarle a mi compañera de este blog, Conchi, el experimento de la semana sin tele, ella meneo la cabeza y me dijo “Eso sería demasiado fácil para ti. Un semana sin tele y sin series online, eso sí sería difícil”.

Y no ha sido para tanto la verdad, cumplido todo a rajatabla, nada de series online ni de tele. Mucha radio y muchos libros. Ahora bien, lo importante es que he sacado en claro. Claro que es cierto que con solo una semana, el experimento es nimio, realmente si tiene efecto es mínimo, pero me ha alegrado darme cuenta de que en realidad tampoco he echado tanto de menos las series ni la tele.

Sobre todo se hace raro al principio la sensación de tiempo indefinido que se tiene, como si hubiera más “medias horas” a lo largo del día. La sensación de llegar a casa y hacerme tranquilamente la cena porque no me voy a perder nada de ese programa que llena mi agenda en las noches semanales ha sido un gustazo. Me ha dado tiempo a más cosas incluso teniendo en cuenta que me he pasado la mitad de la semana enferma y mis fuerzas eran mínimas.

El domingo, mi mañana oficial de series hasta el hartazgo, la pase dibujando y leyendo. Y después de comer en vez de quedarme dormida delante de una peli mala o de estar absorbida por el sofá hasta la hora de la cena, trabaje en cosas que tenía pendiente y fui al cine. Y disfrute muchísimo de la sensación de volver a quedarme anonadada ante la gran pantalla, después de una semana sin nada parecido. Recordé entonces que ahora somos depredadores de la pantalla. Vemos cientos de películas al año, cientos de series. Esa es una de las cosas que nos ha dado Internet, nos ha convertidos en “espectadores del todo”; lo vemos todo, lo que queremos, lo que no, lo que nos cuentan, lo que descubrimos. Vemos vemos vemos.
Eso tan especial que tenían las películas en pantalla grande, el famoso “to be continued” de las series que te dejaba maldiciendo delante de la tele, esa sana espera está desapareciendo. Queremos y tenemos las cosas ya.  Y ojo, no es que este mal, pero creo que no sabemos cuándo usar esa inmediatez.

Ya he vuelto a ver la tele esta semana, y un capitulo de una serie online, pero la verdad es que tampoco me agobia el no hacerlo y me gustaría mantener por lo menos el orden de no ver capítulos en el desayuno ni los domingos, y volver a acoger el gusto por cosas, que sigo haciendo, pero a las que dedico menos tiempo del que me gustaría.

Y sobretodo intentare olvidarme de esta ansiedad que parece llevarnos al consumo radical de cantidades ingentes de material audiovisual, quiero cogerle el gusto a dejarme llevar por el silencio otra vez.

Silvia Piquer.

01 marzo 2013

Peineta y Pandereta.



Creo que muchas de las personas que vimos el Debate sobre el Estado de la Nación sacamos una cosa en claro, Rajoy no vive en España, no sé donde vive, pero aquí no. Todo va bien, se han creado muchos puestos de trabajo, me gustaría saber qué datos maneja… a lo mejor datos que incluso el INEM ignora.

Bárcenas, declara que ha llegado a tener muchos millones más en el extranjero, y ha estado cobrando hasta el mes de Diciembre sus sueldazo del P.P..

Cataluña, la situación en Cataluña es insostenible…y ahora yo me hago una reflexión, que le den la independencia ya, y que se queden con el Rey, qué hay en la Generalitat, que están todos corruptos. La familia Pujol, que bien podría pasar por la familia Corleone, con amenazas incluidas.

El marido de la Infanta, roba, se enriquece, todo presuntamente, y todavía oigo decir que existe la presunción de inocencia… claro que sí, por supuesto que existe, pero lo que también existe es la vergüenza, de la que carece toda la Familia Real, nos roban y encima les estamos manteniendo.

Qué más puede ocurrir, estamos inmersos en una crisis económica, social , política e institucional, y parece que no pasa nada, no protestamos. Lo cual es propio de una República Bananera. En cualquier momento, vamos a tener que pagar por ir a trabajar, y seguimos aguantarnos, pues va a ser verdad que España es el país de la pandereta, con peineta incluida, verdad señor Bárcenas??.

Qué será lo siguiente??, la dimisión del Presidente del Gobierno no creo, para eso se necesita más de un viaje a Canarias, y aún así seguirían votándole.

Supongo que hay cosas que nunca entendere…


Conchi