Sé que ahora no escribo mucho aquí pero os aseguro que seguiré
haciéndolo. Ahora paso más tiempo escribiendo aquí porque es uno de mis
proyectos más importantes, pero no me he olvidado de vosotros ni de mis propósitos
del año.
Voy a haceros un resumen de mi año, porque hablar del
resumen general de la actualidad ya lo hacen las noticias estos días y ya
pasamos bastante vergüenza ajena en esos momentos. Así que os hablare de mi año
que resulta bastante más positivo.
1. Confetti Magazine Infantil.
Por fin acabamos Confetti, mi proyecto junto con mis
compañeras del Munchausen Collective, que nos está trayendo mucho trabajo pero
no menos alegrías. Tener por primera vez en mi vida impreso y en mis manos uno
de mis proyectos fue una sensación increíble que ahora quiero repetir
constantemente.
2. Entra una cosa, sale otra.
Diría que han salido más cosas que han entrado, pero eso
ayuda mucho a limpieza porque la hace infinitamente más rápida (menos cosas que
apartar) y al espacio, lo que antes parecía una habitación minúscula de repente
se convierte en algo de tamaño normal. Este año he logrado hacer el cambio de
armario en una sola mañana, otra proeza conseguida gracias al minimalismo.
Ganas tiempo y energía.
3. No impacto.
Con este propósito me quedo indefinidamente. No solo me hace
sentir mejor persona saber que tiro menos basura sino que he conseguido hacerlo
de manera tan automática que ya ni me doy cuenta: compro menos tonterías, como
mejor pues planifico mucho el menú de la semana antes de ir a la compra y no tiro
comida Y ESTO ULTIMO ES MUY IMPORTANTE.
4. Caminar.
Ir caminando al trabajo se ha convertido en algo necesario
en mi vida, casi más cuando termino de trabajar. El tiempo que tardo en volver
a casa me ayuda a relajarme y dejar de verdad atrás el trabajo, llego a casa
con la mente en blanco dispuesta para las cosas que me esperan y no anclada todavía
en lo que acabo de dejar atrás. Otra de las cosas buenas es que he descubierto
un montón de caminos nuevos, establecimientos pequeños y un sinfín de cosas
escondidas que metida en un coche, un autobús o el metro no hubiera
descubierto. Sigo queriendo comprarme una bicicleta pero como no tengo sitio en
casa y el tema de los aparcamientos de bicicleta es nulo en Madrid, esperare un
poco más, esperemos que caiga este año.
Todavía ando pensando mis propósitos para este año, pero en
general hago un balance súper positivo y muy efectivo de este mi año
experimental que acabo convirtiéndose en mi forma de vida.
Silvia Piquer.